
MEJORA TU AUTOESTIMA CON ESTOS 4 EJERCICIOS
Hay quién conoce muy bien sus puntos débiles y es consciente de que necesita quererse y valorarse un poquito más a sí mismo. Otras veces, adoptamos actitudes y comportamientos que esconden claramente una falta de autoestima, aunque todavía no seamos conscientes de ello y pensemos que sí nos valoramos lo suficiente.
La falta de autoestima se refleja en determinados comportamientos y actitudes, tanto hacia uno mismo como hacia los demás, tales como no hacer valer tus propias opiniones, no respetarse a sí mismo, criticarse constantemente, pensar que los demás siempre son mejores…
Cuando aparentemente sí nos valoramos, pero mostramos inseguridades en el trabajo y fuera de él; posponemos sueños y proyectos; damos demasiada importancia a las opiniones ajenas; o sentimos que no somos merecedores de los logros conseguidos; estamos adoptando conductas que también esconden una baja autoestima.
Si sientes que tú también adoptas alguna de estas conductas, debes permanecer alerta, puesto que a la larga podrías ir reduciendo tu sensación de propia valía y terminar sintiendo un gran malestar, tristeza o ansiedad por baja autoestima.
Quiero compartir contigo 4 de los ejercicios que en mis sesiones de coaching personal propongo a mis coachees para que mejoren su autoestima y se sientan mejor consigo mismos, mejoren su bienestar y su calidad de vida.
Son ejercicios que deben poner en práctica cada vez que puedan, aunque eso suponga tener que forzar las situaciones para poder aplicarlos, ya que la clave de estos ejercicios es convertirlos en hábitos, integrándolos de tal forma que les permita cambiar su comportamiento y mejorar su bienestar.
Te animo a que los pongas tú también en práctica y espero que te resulten útiles. Recuerda que cuanto más los practiques, mejores y más rápidos resultados obtendrás.
1.- NO TE COMPARES
Jamás me cansaré de deciros que cada uno de nosotros somos personas únicas e irrepetibles, con nuestras virtudes y nuestros defectos. Que nadie es perfecto, por más que a veces las redes sociales puedan engañarnos y hacernos pensar que el chico o la chica perfecta existen, o que otros viven vidas ideales y felices.
No te dejes engañar por las apariencias, créeme que cada uno lleva consigo sus circunstancias y detrás de cada stories o de cada foto ideal, hay historias mucho más complicadas de lo que imaginas.
Estudios demuestran que después de estar varios minutos observando la vida de otros a través de redes sociales, nuestra autoestima disminuye y nuestro malestar aumenta; motivo por el cual yo he llegado a sugerir a alguno de mis coachees que redujera el uso de sus redes e incluso que se diera de baja de sus cuentas de Facebook e Instagram.
Si quieres poner en práctica este ejercicio y convertirlo en un hábito, te aconsejo que dejes de comparar tu físico, tus capacidades y tu vida con la de los demás. Si te gusta algo de otra persona, por supuesto puedes darle el valor que merece, pero frena tus pensamientos cuando tu mente empiece a compararte con ella.
Recuerda que por el hecho de que otros prefieran contar con otra persona en el trabajo o como amigo, que la idolatren más que a ti, o le den más likes, no significa que tú no valgas. Se trata simplemente de una elección, pero eso no significa que tú no seas igual o mejor que el “preferido”.
Te diré una frase que repito a todos mis coachees en nuestras sesiones, porque lo creo de todo corazón y también lo pienso de ti: tú eres un 10, así que no permitas que nadie te valore por menos.
2.- VALORA LOS HALAGOS Y LOGROS
La humildad está muy bien, pero a veces nos pasamos de humildes y no sabemos aceptar y agradecer un halago. Muchas veces he dicho de todo corazón a alguien “qué bien te veo, hoy te veo brillar más” y me han contestado “será el color de la camiseta, que me sienta bien…”.
Si cuando recibes una felicitación, un reconocimiento por el trabajo bien hecho, o un cumplido por parte de un amigo, piensas que lo dicen para quedar bien, para hacerte la pelota o para conseguir algo de ti, entonces te animo a que revises estas creencias.
Empieza a practicar este ejercicio cada vez que alguien te diga algo positivo. A partir de hoy, cuando recibas una muestra de reconocimiento, va a dar las gracias y vas a abrazar ese cumplido, creyéndotelo y disfrutando de la sensación de bienestar, sin excusas.
Del mismo modo, quiero que celebres y a agradezcas tus logros siendo consciente de que lo has conseguido por tu esfuerzo y valía. Deja de poner la responsabilidad fuera, en la suerte, el destino, o el Universo. Tú has sido quién lo ha logrado. Felicítate por ello.
3.- PRIORIZA EN TI
Aprende a poner el foco en ti, está bien que pienses en los demás y en su bienestar, pero prioriza también en tus necesidades y no sólo en hacer lo que los demás esperan de ti.
Escúchate, da valor a tus necesidades y dales la misma importancia que das a las necesidades de los demás.
Practica el darte los caprichos que te apetezcan de vez en cuando: si te apetece comprarte una pieza de ropa, pues lo haces, eres merecedor/a de ello.
Para profundizar en este hábito, te recomiendo que releas mi post “Cuando tú te conviertes en tu prioridad”.
4.- EXPRÉSATE SIN MIEDO
Las personas con baja autoestima tienden a necesitar la aprobación de los demás y su mayor miedo es el rechazo y no sentirse queridos por los demás.
Por eso a menudo no se atreven a llevar la contraria, evitan cualquier tipo de enfrentamiento y prefieren callarse sus propias opiniones e incluso falsearlas, simplemente para encajar en un grupo o sentirse aceptados por otros.
Se acabó este comportamiento. Si quieres mejorar tu autoestima, a partir de hoy vas a ser capaz de expresar tus opiniones, sean cuales sean las reacciones de los demás.
Siempre que te expreses con respeto y educación, no debes tener miedo a opinar diferente que los demás. Es más, si por ese motivo eres excluido de un grupo, significa que esas personas no merecen la pena, que son intolerantes y no merecen tu compañía.
Rodéate de gente que te respete, que te acepte y que te quiera tal y como eres. Al fin y al cabo, tener una buena autoestima significa valorarse a sí mismo y darse el permiso de ser auténtico estés donde y con quién estés.
[subscribe2]